Si bien es cierto que comer es una necesidad básica para mantenernos con vida, también es una actividad muy social. A lo largo de la historia, las personas se han reunido alrededor de las comidas para intercambiar historias, compartir su cultura y simplemente establecer vínculos entre sí. Sin embargo, en este mundo moderno en el que vivimos, muchos de nosotros tendemos a comer solos debido a nuestro ajetreado estilo de vida o a nuestras elecciones personales. Esto puede parecer más conveniente, pero en realidad tiene algunos efectos perjudiciales en nuestro bienestar general. En este artículo hablaremos de los beneficios de comer en compañía y de por qué comer solo puede ser perjudicial para la salud.
Mejores Opciones de Alimentos:
Cuando comemos con otras personas, tendemos a elegir mejor los alimentos porque tenemos en cuenta las preferencias o necesidades dietéticas de la otra persona. Por ejemplo, si estás comiendo con alguien que es vegetariano, puedes optar por pedir una ensalada o comida con mas vegetales. En consecuencia, esto conduce a una comida más rica en nutrientes, ya que las personas suelen elegir también guarniciones más saludables. Mientras que, cuando comemos solos, tendemos a elegir la conveniencia en lugar de la nutrición, lo que afecta nuestra salud a largo plazo.
Reduce los Niveles de Estrés:
Compartir comidas con amigos o familiares puede ayudar a reducir los niveles de estrés, mejorando así nuestra salud mental. Reír y hablar con los demás mientras comemos envía señales al cerebro de que estamos seguros y contentos, lo que reduce los niveles de cortisol. El cortisol es una hormona secretada por nuestras glándulas suprarrenales y se la conoce como la hormona del estrés; Los niveles altos persistentes de cortisol pueden provocar una amplia gama de problemas de salud, como ansiedad, depresión y problemas de peso (ya que los niveles altos de cortisol afectan la sensibilidad a la insulina).
Impacta Positivamente la Digestión:
La mayoría de nosotros apresuramos nuestras comidas cuando comemos solos, lo que podría tener un efecto perjudicial en la digestión. Comer rápido puede provocar que se coma en exceso, lo que puede provocar indigestión, problemas gastrointestinales y acidez de estómago. Comer con otras personas a menudo nos hace comer más despacio de lo habitual y disfrutar de nuestras comidas en lugar de apresurarnos. Comer despacio tiene un impacto positivo en el sistema digestivo y puede reducir la hinchazón, el estreñimiento y otros síntomas gastrointestinales.
Construye Relaciones Saludables:
Reunirse en torno a una comida es una de las tradiciones más antiguas y ayuda a crear relaciones saludables. Comer con alguien demuestra que confías y valoras su presencia, y envía señales a tu cerebro de que estás contento con la compañía. A veces, compartir comidas con otras personas puede incluso ayudarnos a vincularnos con ellas y crear oportunidades para conversaciones profundas e importantes. Comer solo no permite que se desarrollen este tipo de relaciones, lo que es perjudicial para nuestra salud mental.
Aumenta tu Metabolismo:
Comer en compañía de otras personas también puede mejorar nuestro metabolismo. Compartir comida con otras personas puede evocar un estado psicológico de satisfacción y relajación, que puede estimular el metabolismo debido a la activación del sistema nervioso parasimpático. Cuando comemos solos, tendemos a consumir rápidamente nuestros alimentos sin pensarlo, lo que no beneficia nuestro metabolismo.